De la conquista...

0

Por Rodrigo Juárez Ortiz


Un día como ayer, 13 de Agosto, pero de 1521, sucedió un evento trascendental en las tierras del Anáhuac, nos referimos a la caÍda de una de las mas grandes y bellas ciudades del mundo (de su época), de acuerdo con cronistas especializados en estos menesteres, la gran Tenochtitlán, fundada por los mexicas en una isla del lago de Texcoco en c. 1325, la cual encontró el inicio de su desarrollo en 1376 bajo el mando del tlatoani Acamapixtli ( o Acamapichtli). Ya sabemos que tuvo alianzas con señoríos de los alrededores,como Texcoco y Tlacopan y por la fuerza de las armas, pues eran guereros muy consumados, se impuso a varias ciudades, a las cuales les exigía tributos lo que hizo que acrecentara su prosperidad, sin perjuicio de que también se extendió territorialmente mediante la creación de las chinampas, así como su anexión de Tlatelolco. El imperio azteca, después, fue uno de los más grandes de este continente.

Todos recuerdan la leyenda de su fundación, la peregrinación al mando de Tenoch y el hallazgo de un águila sobre un nopal devorando a una serpiente, sobre una roca en un lago, que actualmente es el tema principal del escudo nacional y que forma parte de nuestro lábaro patrio.

Pues bien, ese 13 de Agosto, la gran Tenchtitlán, ciudad capital del imperio mexica, sucumbió ante el embate furioso de los pueblos vengativos que formaban parte de sus tributarios, principalmente los tlaxcaltecas, quienes fueron asuzados por el aventurero español Hernán Cortés, quien al mando de un puñado de ganapanes, aventureros y fascinerosos, desertando del mando del gobernador de Cuba, Diego Velázquez, quien lo había enviado a reconocer estos territorios, le pagó con la traición y emprendió su propia aventura, la cual fue auspiciada por una gran ambición de riquezas materiales conseguidas a través del “excremento de los dioses” (teocuitlatl) como los mexicas llamaban al oro, habida cuenta de que Moctezuma II oyendo una leyenda en virtud de la cual Quetzalcóatl (serpiente emplumada) quien era deificado en estas tierras por sus grandes bienes que les proporcionó en su estancia en estos lares, había pronosticado su regreso ( pues amenazó con regresar para cobrarse agravios) y al recibir la noticia de que hombres blancos y barbados se encontraban en lo que ahora es Veracruz (la villa rica de la Vera Cruz) y que venian en naves tan grandes como casas, Moctezuma II, congruente con sus mitos, inocentemente trató de alejar a Cortés y sus huestes, haciéndole grandes obsequios en piezas de oro y otros ricos regalos con lo cual lo único que logró fue acrecentar su ya desmedidad ambición y de ahí, con una astucia innegable, una inteligencia indiscutible y una sagacidad demostrada,aunada a la traición y a la mentira, Cortés logró convencer a los enemigos ancestrales de los mexicas, los tlaxcaltecas, a que lo acompañaran a la conquista del gran imperio azteca.

No olvidemos que las huestes indígenas se contaban por miles y los aventureros de Cortés eran contados, en proporción, sin embargo traían consigo el poder inmmenso de la pólvora, sus cañones, armaduras de acero cubriendo sus cuerpos, mandobles y espadas, ballestas y caballos, animales que no existían en estos lares lo que hacía que los naturales del país confundieran al jinete y al caballo con un solo ser y como los mexicas no mataban a sus enemigos en batalla, sino que los hacían prisioneros, para su consiguiente esclavitud o sacrificio a sus dioses, (guerras floridas),tenían primero que combatir en contra de los ejércitos tlaxcaltecas y aliados y después llegar hasta los peninsulares a quienes trataban de atrapar vivos (caballo y jinete).

Después de la matanza de Cholula, después del descalabro de su huída que culminó en la llamada “noche triste” donde Cortés lloró su derrota en un viejo ahuehuete, se rehizo y por fin sitió a la gran ciudad, defendida por el tlatoani Cuauhtémoc, quien después de varios dias de asedio y cortados todos sus puntos de acceso a suministros, no tuvo mas remedio que capitular con toda la dignidad de su jerarquía.

La conquista fue cruel, despiadada, voraz y sangrienta. Los logros de la espada fueron ligeramente menguados por la cruz, solo por algunos frailes (obviamente del bajo clero), quienes conscientes del trato inhumano y esclavista infligido a los naturales, lo intentaron .Y no solo fueron 300 años ( 1521- 1821) de esclavitud y sometimiento, sino que esta situación prevaleció durante los años subsiguientes y aún, en estos días, tenemos muestras palpables de ello.

A cambio, hay que reconocerlo, esto nos incorporó al mundo y la cultura occidental de la cual somos miembros usufructuarios, a pesar de lo costoso de ello.

O usted, culto lector, ¿qué opina?



El contenido plasmado en este blog es producto de la reflexión de su autor, de sus colaboradores y de los pensadores que en él se citan. Cualquier semejanza con la realidad o alguna ficcón literaria, televisiva, psicótica paranoide o de cualquier otra índole es mera coincidencia

Periplos en red busca crear espacios intelectuales donde los universitarios y académicos expresen sus inquietudes en torno a diferentes temas, motivo por el cual, las opiniones e ideas que expresan los autores no reflejan necesariamente las de Periplos en red , porque son responsabilidad de quienes colaboran para el blog escribiendo sus artículos.



Periplos en Red

Grab this Headline Animator

 
Ir Abajo Ir Arriba