De lo increíble...

0

Por el Mtro. Rodrigo Juárez Ortiz

En las páginas del diario El Sol de Acapulco, recién aparecieron unas notas de Javier Moreno Nieto sobre Juan Álvarez prócer iniciador de la erección como tal, del estado de Guerrero.

Al respecto, vale la pena hacer hincapié en unos datos que por impactantes motivan no solo a la reflexión sino que invitan a la acción entusiasta, decidida y especialmente eficaz, para subsanar tan terrible e impresionante rezago histórico de nuestro pueblo.

Es el caso que cuando se trató de la cesión del Departamento de Tlapa por parte del estado de Puebla, para la erección del estado de Guerrero, se plantearon en el Congreso poblano cuestiones muy importantes que traduce de su fuente el autor cuyo entrecomillado no es nuestro y comenta sobre los “memorable y razonables debates” de los legisladores poblanos, los cuales se lamentaban de que: “los pueblos del sur… están reducidos a una horrorosa pobreza; sus habitaciones son miserables chozas, sus alimentos los frutos de los árboles y sus mejores pueblos, monumentos de destrucción e ignorancia… jamás procuraron hacerles salir del estado triste en que hasta hoy se encuentran… si se dieron… medidas para obligarlos a abrazar el cristianismo se hicieron ineficaces, puesto que antes de hacerlos cristianos, los debieron enseñar a ser hombres y vivir como tales”.

En el congreso de Puebla se manejaba que no era suficiente “…una dilatada extensión de terreno, a quien la naturaleza haya dado extraordinaria fecundidad, ni un crecido número de habitantes que no sepan ser ciudadanos, sino que se requieren, además, otras cualidades morales: la ilustración, como materia del sabio; el espíritu de mejora, como materia del empresario y el crear necesidades, para que los trabajadores tengan ocupación y recompensa” y por si fuera poco continuando refiriéndose al Departamento de Tlapa, que es el que iban a ceder, sostenían que: “todo lo que la miseria tiene de horrible; todo lo que la ignorancia tiene de abatido; en fin, todo lo que en el abandono y destrucción tiene de mas espantoso; he ahí en compendio el Departamento de Tlapa… ¿Qué capacidad hay en ellos para ocupar los puestos públicos y desempeñar las altas funciones administrativas?”.

Si bien es cierto que Juan Álvarez era consciente de ello, trató de refutarlos diciendo que sí existían cualidades suficientes en los habitantes de esta región para dirigir al estado.

No olvidemos que esto fue dicho en las postrimerías del año 1849, fecha en que fue erigido el estado de Guerrero a instancias de Juan Álvarez y de Nicolás Braco y tampoco olvidemos que este ultimo fungía como presidente del Congreso poblano cuando sentó los pródromos en dicha entidad para la erección de nuestro actual estado de Guerrero.

Aquí lo increíble, lo inverosímil, lo espeluznante, lo siniestro, lo dramático y lo patético, es que tantos años después y merced a los movimientos surgidos con el Plan de Ayutla, de la Reforma y sobre todo de la Revolución Mexicana, no ha habido cambio alguno de trascendental importancia que mejore las condiciones de nuestro pueblo. Tan esto es así que esta condición de miseria (recuérdese que uno de sus municipios tiene el primer lugar en pobreza de este país) no ha cambiado sustancialmente y uno se pregunta ¿Y nuestros “próceres”, gobernantes, lideres políticos, que han hecho desde entonces hasta nuestros días?

Es cierto que si leemos los informes de Gobierno de todos los que han estado al frente de las instituciones del estado al margen de la danza de los millones que nos dicen se han empleado en obras de beneficio social, y que no dudamos se hayan realizado algunos esfuerzos, en términos generales podríamos adjudicarlos a dádivas gubernamentales, a donaciones paternalistas, a demagogia pura, toda vez que lo único que hacen es crear una dependencia tremenda de estos pueblos hacia la “ayuda” gubernamental y no se le dan los elementos necesarios para la autosuficiencia y que se traduce en el ya clásico dicho de “no les regales el pescado, enséñales a pescar”.

Los mismos principios siguen vigentes. Sin embargo, las mismas miserias y carencias siguen siendo actuales de tal suerte que es obligado reflexionar sobre la necesidad imperiosa, inaplazable e insoslayable de concentrar esfuerzos y sobre todo, capacitar y adiestrar a nuestros gobernantes para que teniendo visión de estado puedan crear políticas públicas que real y positivamente ayuden a superar el estado miserable en que se debaten nuestra etnias. Es elemental. O usted, impactado lector ¿Qué opina?



El contenido plasmado en este blog es producto de la reflexión de su autor, de sus colaboradores y de los pensadores que en él se citan. Cualquier semejanza con la realidad o alguna ficcón literaria, televisiva, psicótica paranoide o de cualquier otra índole es mera coincidencia

Periplos en red busca crear espacios intelectuales donde los universitarios y académicos expresen sus inquietudes en torno a diferentes temas, motivo por el cual, las opiniones e ideas que expresan los autores no reflejan necesariamente las de Periplos en red , porque son responsabilidad de quienes colaboran para el blog escribiendo sus artículos.



Periplos en Red

Grab this Headline Animator

 
Ir Abajo Ir Arriba