Un solo turista no hace verano

Por el Lic. José Cedano Galera
Analista y consultor turístico
ACATUR CONSULTORES

Año con año en Acapulco todos los prestadores de servicios turísticos esperan ansiosamente a que el verano llegue porque, casi al mismo tiempo, se abre el periodo vacacional y con éste la posibilidad de recibir turistas nacionales, quienes por tradición, viajan hasta este punto del Pacífico con su familia y gastan generosamente con tal de recuperar las fuerzas y premiar a sus hijos por su arduo trabajo en las aulas.

Sin embargo, el verano pasado nos quedamos con las ganas de que se cumplieran tales expectativas, es decir, hubo turistas, pero en pocas cantidades. ¿Por qué? Que por las noticias de que la autopista estaba en pésimas condiciones, que por la lluvia, que por la violencia, que por los malos tratos en restaurantes, que por el ambulantaje, que por el Boulevard de las naciones destrozado, que por los baches en toda la ciudad, que por las calles y playas sucias, que por la bahía contaminada, que por la oferta extrahotelera, que por la falta de promociones, que por la falta de publicidad, más un largo etcétera. Lo más grave de este problema no es la cantidad de razones expuestas, sino el hecho de que todas ellas estén plenamente justificadas por la realidad y representen, en su totalidad, un reflejo fiel del Acapulco actual, lo cual por supuesto, afecta la imagen turística de nuestra ciudad y puerto.

Nadie quiere ir a un lugar inseguro en donde su familia pueda correr toda clase de riesgos, desde enfermedades hasta daños físicos en su persona o en sus propiedades. Es lamentable que mientras tanto, las autoridades del ramo se ocupen en insultar la inteligencia de la ciudadanía reportando afluencias de turistas y derramas económicas inexistentes, con respecto a las cuales, el Municipio y el Estado no se ponen de acuerdo en la cifras y cada uno maneja las que mejor le convengan al funcionario en turno; unas más fantásticas que otras, pero en ambos casos ajenas a la realidad. Por esta razón, los prestadores de servicios turísticos ya no confían en las autoridades correspondientes. Prefieren hacer sus esfuerzos de promoción solos y tratan, de la misma forma, de invertir en sus propiedades, aunque cada día resulte más difícil convencer a los propietarios de que ésta se recuperará.

En suma, Acapulco requiere, con urgencia, que se trabaje de manera ordenada y que se planifique de manera estratégica, con el propósito de mejorar su competitividad. Actualmente, según cifras de organismos privados nacionales, Guerrero se encuentra en el lugar número 30 en lo que respecta a competitividad. ¿Creen, amigos lectores, que eso ayuda a la inversión? ¡Por supuesto que no! Ya es tiempo de que las autoridades se ocupen de resolver los problemas relacionados con el agua, el drenaje, las plantas de tratamiento, el reciclaje, etc., ya que lo que vendemos es la playa, y si hay alguna duda de su limpieza, eso alejará aún más a los turistas, especialmente, a los que tienen mejores niveles económicos. Por todo lo expuesto anteriormente, les pedimos a las autoridades orden, limpieza, seguridad y, de manera fundamental, que adopten una mentalidad sustentable. Nuestros hijos se merecen una ciudad mejor. Rescatemos a Acapulco.

Correo del Autor: promoturistica@yahoo.com.mx