De la expectativa...

1

Por el Mtro. Rodrigo Juárez Ortiz

Una vez más volvemos a la carga, solo que ahora con una expectativa, con la esperanza de conseguir una cosa y en la especie, se trata de estar a la expectativa o sea, estar atento para enterarse de algo cuando ocurra y obrar correspondientemente.

Durante años, hemos estado insistiendo, en el ámbito de nuestra competencia, ya sea en lo personal, en el ejercicio de nuestra profesión, en la docencia, con generación tras generación de jóvenes universitarios, en nuestros artículos periodísticos, en la televisión o la radio, en el tratamiento de asuntos de interés para nuestra colectividad, en fin, de diferentes maneras y por diferentes medios, en que se realicen campañas de concienciación para que la gente no tire basura en las calles, ni en los cauces pluviales, ni en ningún otro lugar, ya sea público o privado.

Hemos insistido, ad nauseam, en que debe de instruirse a la población en general a desterrar total, completa y absolutamente al deporte local, al hábito execrable y siniestro, espeluznante y fatal, de arrojar basura en las calles. Ello, desde luego, siguiendo los tres pasos menester que siempre hemos sugerido, a saber: a) Información, es decir, que se haga saber plenamente a la comunidad del problema, de sus causas, de sus consecuencias y, sobre todo, de la forma de solucionarlo o resolverlo; b) Concienciación, es decir, que la gente tenga la capacidad de darse cuenta (vulgo: que le caiga el veinte o el Centenario, yo agregaría el Calendario Azteca), pero el caso es que les caiga algo y se haga conciencia de lo que estamos provocando con nuestra falta absoluta de higiene y de educación y c) Acción, o sea, la actividad que debe realizarse para llevar al cabo el programa o la campaña tendente a la prevención y solución de tan gravísiatentado en contra de nuestro equilibrio ecológico, en contra de nuestro medio ambiente y en contra, por supuesto, de nuestra salud, sin perjuicio del deterioro de nuestra imagen urbana.

Y ahora viene lo bueno. Lo plausible. El día 19 de junio, los medios nos informaron con una nota en primera plana que decía: “Proyectan sancionar por tirar basura en las calles”, cosa que nos llenó inmensamente de júbilo, y a continuación reseñaba lo dicho por el Dr. Manuel Añorve Baños, presidente constitucional del Municipio de Acapulco de Juárez, en el sentido de que esta medida será preventiva, es decir, que “esta acción la emprenderá al concluir el período electoral, debido a las restricciones que tienen los gobiernos”, aclarando que “en primera instancia esta medida será solo preventiva, debido a que no se pueden aplicar sanciones sin antes haber advertido”.

Esto, desde luego, es congruente con su política de Acapulco te quiero de diez, siendo congruente con el estribillo de Acapulco te quiero…limpio. ¡Enhorabuena!

Decisiones de esta naturaleza son las que cuentan con todo el respaldo de una ciudadanía responsable y que ame a su terruño, así como el entorno en el que vive.

Ojalá y sirva de ejemplo a nivel estatal, cuando menos, para que las poblaciones de nuestro estado, hagan algo por superar tan siniestro hábito de tirar basura en las calles, como lo vemos desde que llegamos a cualquier población importante y desde la carretera de acceso ya se ven, en ambos lados, los cúmulos de basura y plásticos de “adorno”.

Sin embargo, esto requiere de la instalación de botes de basura por todas partes, aunado a un servicio eficiente y puntual de su recolección, independientemente de las campañas masivas y contundentes que deben de realizarse para instar a la población en general, a no tirarla en las calles, para lo cual se deben dar cursos, y conferencias públicas en escuelas, sindicatos, partidos políticos, asociaciones civiles, organismos públicos y privados, a comerciantes, prestadores de servicios, profesionistas, vendedores ambulantes en fin, a gobernantes y gobernados para tener éxito en esta empresa en la cual, por supuesto, todos debemos de colaborar para gozar de un mejor entorno y tener un ambiente mas sano y, por supuesto, una mejor calidad de vida.

Y si después de instrumentar esta campaña, todavía existen bípedos implumes que arrojen basura en las calles, entonces que se apliquen las sanciones que correspondan, sea quien sea. No olvidemos que aun teniendo a todo un conjunto de barrenderos limpiando, su esfuerzo es inútil si detrás de ellos está un ejército de puercos irresponsables tirando su basura públicamente. Acapulco no se lo merece. O usted, expectante lector, ¿qué opina?

1 Comentario:

Guillermo E. TibaldO dijo...

Muy buen artículo Maestro (por cierto, yo pensaba que era ministro jeje, por la abreviación, me confundí)

Me alegra que haya personas como vos que alientan enormemente a pensar en un cambio =)

Te mando mis saludos y felicitacioness

:)

Guillermo Exequiel Tibaldo



El contenido plasmado en este blog es producto de la reflexión de su autor, de sus colaboradores y de los pensadores que en él se citan. Cualquier semejanza con la realidad o alguna ficcón literaria, televisiva, psicótica paranoide o de cualquier otra índole es mera coincidencia

Periplos en red busca crear espacios intelectuales donde los universitarios y académicos expresen sus inquietudes en torno a diferentes temas, motivo por el cual, las opiniones e ideas que expresan los autores no reflejan necesariamente las de Periplos en red , porque son responsabilidad de quienes colaboran para el blog escribiendo sus artículos.



Periplos en Red

Grab this Headline Animator

 
Ir Abajo Ir Arriba