Diseño de escenarios futuros en el ámbito educativo

Por el Mtro. Fernando Reyes Baños


Es evidente que las universidades actuales están inmersas en un ambiente de cambio continuo, razón por la cual resulta importante que las personas que toman decisiones desde ese marco institucional específico, busquen mayor claridad sobre los distintos futuros alternativos que puedan presentárseles (González, s/f.). Es por ello que probablemente resulte cada vez más riesgoso confiar en un plan diseñado para un futuro seguro y por ende es que los escenarios se usen tanto últimamente, ya que éstos permiten razonar en torno al diseño de futuros posibles, lo que promueve considerar diversos conjuntos de eventos y los planes correspondientes más adecuados.

Vinculados con el proceso de la planeación, específicamente con su fase normativa-prospectiva, Ruiz (2000) comenta que los escenarios pueden usarse para explorar el futuro de una institución educativa, pues ésta, al igual que cualquier otra organización, también se ve afectada por el ambiente interno y externo a la misma.

Al respecto, Gutiérrez (2007) explica que los escenarios de los próximos años probablemente se caracterizarán por su alta incertidumbre, razón por la cual los cambios serán difíciles de predecir, implicando que las instituciones educativas se esfuercen por reflexionar y detectar con anticipación, desde el presente, los cambios que puedan condicionar su futuro.

Lo que se busca con los escenarios, según lo describen Miklos y Tello (citados por Ruiz, 2000), es analizar, de manera integral, las tendencias que están presentándose en el entorno para lograr una visión general del futuro, permitiéndole a la institución adaptarse a los cambios que plantea el futuro (flexibilidad) y definir las estrategias a realizar para lograr las metas que se ha propuesto (anticipación).

En este sentido, las ventajas que aporta la definición de escenarios como parte inicial de la planeación de una institución educativa son dos: primera, que tales actividades, al realizarse antes de la planeación estratégica, favorecen romper con los paradigmas tradicionales para enfrentar el cambio, por ejemplo, la reacción tardía y por inercia que presentan algunas universidades cada vez que ocurren cambios en el ambiente externo (Gutiérrez, 2007); y segunda, que representan una experiencia colectiva que fomenta la participación y cohesión de todos los actores involucrados (Ruiz, 2000).

Existen metodologías distintas para elaborar escenarios. Una de ellas está basada en la propuesta de Ruiz (2000) y que a continuación se describe:

1. Identificar las tendencias que serán objeto de análisis del ambiente externo.
2. Integrar un listado con las tendencias más importantes y clasificarlas en dos grupos: las de mayor impacto para el ambiente educativo y las de mayor incertidumbre.
3. Seleccionar la tendencia más incierta y la que más impacte al ambiente educativo (tendencias que, obviamente, serán distintas) y elaborar con ellas una matriz de cuatro cuadrantes, que combine los extremos de cada una.
4. Diseñar para cada cuadrante de la matriz en cuestión, una descripción del futuro esperado según la situación de las tendencias seleccionadas, identificando a éste con un nombre que indique qué sucederá en dicho escenario.


Referencias

González, I. (s/f.). Escenarios exploratorios: como herramienta para la valuación de negocios en marcha. Recuperado el 06 de septiembre de 2011 de http://www.negociosenmarcha.com.mx/Pagina/EEIGS.pdf
The Futures Group (2004). Escenarios. En J.C. Glenn (Ed.), Metodología de Investigación de Futuros (pp. 399-433). Buenos Aires, Argentina. Recuperado de http://guajiros.udea.edu.co/fnsp/cvsp/politicaspublicas/futures_group_escenarios.pdf
Ruiz, M. I. (2000). Sistema de planeación para instituciones educativas. México: Trillas & ITESM Universidad Virtual.
Gutiérrez, K. (2007). El papel de la prospectiva en las instituciones universitarias desde una perspectiva conceptual [Versión impresa]. Revista Informe de Investigaciones Educativas, 21, 79-91.