De lo porvenir...

Por Rodrigo Juárez Ortiz


Entendemos por lo por venir todo aquello que esperamos, de lo que tenemos la expectativa, de lo que está por llegar o lo que anhelamos, de todo aquello que significa, las mas de las veces, una esperanza aun cuando puede ser una fatalidad. Lo importante es que estamos viendo a futuro.

El ser humano es proclive a crear, imaginativamente, una serie de escenarios que quiere convertir en realidades con el solo pensar o soñar en su realización fáctica, pero se olvida de que para ello es menester realizar, llevar al cabo toda una serie de acciones tendentes a su consecución.

De esta guisa esta época es propicia para desear una y mil cosas que piensan necesitan y con solo desearlo lo van a lograr..

Se llenan de buenos propósitos, de buenos deseos, se los transmiten a sus seres queridos y no queridos solo para llenar un cartabón, un molde, un estereotipo de carácter social, pero en automático, las mas de las veces sin sentirlo, sin quererlo (hacia los demás) pero anhelándolo para sí mismos.

En suma, se trata de actualizar la expresión año nuevo, vida nueva, costumbres: las mismas.

Esa es la triste realidad, sin embargo se vale soñar, es muy edificante pensar a futuro, soñar despierto, desear el bien de los demás, pero debemos estar conscientes de que todo ello sí puede convertirse en realidad si actuamos de tal manera que propiciemos y logremos su realización y para ello es menester en principio, cambiar de actitud frente al mundo y la vida en el sentido de quitar, de eliminar los lastres que traemos de antaño, sobre una serie de atavismos consistentes en fanatismos religiosos, en prejuicios, en actitudes revanchistas, en odios, venganzas, envidias, celos, corajes, y toda esa serie de actitudes negativas que a veces invaden a los bípedos implumes y que se convierten en verdaderos lastres que les impiden su realización personal.

De ahí que con motivo del inicio de un nuevo año, es deseable pensar en todo lo positivo que se quiera, pero haciendo conciencia de lo bondadoso que resulte para uno y para los demás.

Lo deseado no siempre es asequible desde los primeros momentos de su deseo, es menester estar imbuido de un deseo sincero de su realización, es necesario pensar en el bien que puede reportarle a los demás y por añadidura nos alcanza a nosotros, partiendo de la idea de que al desear el bien se confirma la ecuación y obtenemos el bien en un fenómeno identificado como la ley de la atracción, habida cuenta de que todo lo que se piensa o desea “ bueno” o “ malo” es lo que se va a atraer, de ahí que se pretenda, en ese cambio de actitud, modificar nuestros esquemas tradicionales y superarlos en un verdadero ejercicio de elevación de conciencia, no solo para lograr un mayor grado de evolución para ascender espiritualmente, sino para lograr ser mejores seres humanos en donde el amor se prodigue en aras de una mejor y mayor comprensión entre nosotros y así lograr nuestros objetivos prístinos que poseemos desde el inicio de los tiempos.

En ese tenor hay una comunidad de intereses en todos los seres humanos solo que unos logran su cometido y otros necesitan mas tiempo para ello y por lo que respecta a nuestro país, después de haber padecido la nefasta “docena trágica” de los dos últimos “gobiernos” federales corruptos e ineficientes, se tiene la expectativa, la ilusión, la esperanza de lograr mejores estadios de seguridad personal y pública, de tranquilidad y de paz, para lograr los objetivos propuestos, relativos al acceso al empleo bien remunerado, a una mas equitativa distribución del ingreso, a mejores y mayores oportunidades para los jóvenes y adultos en condiciones de lograr frutos con base en una educación laica, democrática, en donde todos tengan las mismas oportunidades, pero también hacer las cosas accesibles para aquellos que necesitan mas elementos para estar en buenas condiciones de una sana competitividad.

Urge que nuestro pueblo demuestre su gran capacidad productiva, pero se necesita elevar su nivel de vida, de educación, de lograr mejores condiciones de salud, mas oportunidades de trabajo y mayores espacios de disfrute en los tiempos de descanso, propiciando el deporte, el estudio, los viajes de recreo, el cultivo de los valores, la educación cívica y todo aquello que enaltezca al ser humano.

Todo ello trasladado a nuestro puerto implica abrirle el paso a la esperanza de lograr cambios de fondo y de forma para lograr tan caros anhelos.

Estamos estrenando administración municipal y por supuesto que confiamos en que se logren cambios importantes en nuestro puerto, solo que llama la atención de que ellos declaran de que el crimen organizado amenaza a los servidores públicos y les producen temor las amenazas, incluyendo al primer edil, por lo cual no existen acciones en la obra pública, en la prestación de servicios públicos y en la recaudación de rentas para los ingresos necesarios para su funcionamiento, entonces surge la inevitable pregunta ¿ ya no se puede hacer nada?.

Entendemos que el gobierno, la fuerza del estado existe para hacer valer sus acciones frente a cualquier particular organizado o no. Se tiene el apoyo del Ejército, la Marina, la Aviación, la policía federal, la policía estatal, la policía ministerial, la policía municipal y otras mas, ergo, no queda mas que entrarle al toro y desearles, cono a todos los demás mucha suerte y sobre todo, mucho éxito en su planes para este nuevo año y para siempre. Todos lo necesitamos. O usted, visionario lector, ¿qué opina?