Por el Grupo 4010 de la Carrera de Psicología de la UAA


Con los provocativos letreritos de “Motel a 2 metros” y “Vente al motel”, entre otros, el grupo 4010 de la Facultad de Psicología de la UAA presentó el viernes 30 de mayo de 2008, basándose en el concepto creativo de “motel”, su periódico mural “Los trastornos sexuales y de la identidad sexual”*, el cual fue evaluado por la psicóloga Elsa Silvia Rangel Granados, maestra visitante de la UNAM, como trabajo final de la materia Psicopatología II.

El texto que sigue es una recopilación realizada por la estudiante María del Carmen Ventura Reyes, que toma como base la información presentada por el grupo 4010 en ese trabajo.



Los trastornos sexuales y de la identidad sexual están caracterizados por una alteración de los procesos correspondientes al ciclo de la respuesta sexual o por dolor asociado con la realización del acto sexual. El ciclo de la respuesta sexual se divide en:

Deseo.- Fantasías sobre la actividad sexual y deseo de realizarlas.
Excitación.- Sensación subjetiva de placer sexual acompañada de cambios fisiológicos como la erección, la lubricación y la expansión de la vagina.
Orgasmo.- Punto máximo del placer sexual: en el hombre va seguido de la emisión del semen, mientras que en la mujer se producen contracciones de la vagina.
Resolución.- Sensación de relajación muscular y de bienestar general: durante esta etapa los hombres no presentan erecciones, sin embargo las mujeres son capaces de responder a una estimulación casi inmediatamente.

El trastorno puede ser de toda la vida o adquirido, también puede ser general, situacional o presentarse en una situación específica. Puede deberse a factores psicológicos o a factores combinados (psicológicos y médicos a la vez) o por consumo de sustancias.

Los trastornos se clasifican en: disfunciones sexuales, parafilias y trastornos de la identidad sexual. A continuación, revisaremos cada una de estas clases.


1) Disfunciones sexuales

Son aquellas alteraciones que se producen en la respuesta sexual (en las fases de deseo, excitación, orgasmo o resolución) de una persona de manera persistente y recurrente, que producen en la persona una sensación de infelicidad, coartan su libertad o constituyen un problema. A continuación, revisaremos su clasificación:

Deseo sexual hipoactivo.- Se caracteriza por la disminución o ausencia de deseos de actividad sexual o fantasías sexuales que provocan malestar o dificultades interpersonales a quien las sufre. En ocasiones el deseo sexual hipoactivo ha existido durante toda la vida de la persona, en cuyo caso se denomina deseo sexual hipoactivo primario, mientras que en otras ocasiones ha tenido un origen claramente identificable en un momento determinado, denominándosele como deseo sexual hipoactivo secundario; en este último caso es frecuente, que la pérdida o disminución del deseo se deba a la presencia de otro tipo de trastorno sexual como, por ejemplo, problemas de excitación (impotencia en el caso del hombre) y problemas de orgasmo (anorgasmia en el caso de la mujer).

Trastorno por aversión al sexo.- Se caracteriza por una elevada aversión hacia los contactos sexuales genitales con una pareja y por la evitación de este tipo de relaciones, lo que provoca a la persona que lo padece malestar intenso o dificultades en sus relaciones interpersonales. La persona suele experimentar una reacción de ansiedad ante los intentos de relación sexual, que puede llegar a alcanzar diferentes grados de intensidad, incluyendo (en casos extremos) ataques de pánico. Ocasionalmente, el trastorno por aversión al sexo se encuentra asociado a otras disfunciones sexuales, como la dispareunia (experiencia de dolor durante las relaciones sexuales) o a otros trastornos psicológicos: depresión, trastorno por estrés postraumático o trastorno obsesivo-compulsivo.

Trastorno de la excitación sexual en la mujer.- Se manifiesta por la incapacidad para obtener o mantener una respuesta de lubricación propia de la etapa de excitación hasta el término de la relación sexual.

Trastorno de la erección en el hombre.- Incapacidad para alcanzar o mantener una erección lo bastante firme hasta el final de la actividad sexual, o para realizar el coito. Este problema puede ocurrir a cualquier edad. Gran parte de los problemas de erección se deben a causas psicológicas como es, por ejemplo, el temor al fracaso sexual. El uso y abuso de múltiples sustancias (como el alcohol) y algunos fármacos también pueden contribuir a que surja este problema.

Orgasmo femenino inhibido.- La mujer presenta una ausencia o retraso persistente o recurrente del orgasmo tras una fase de excitación sexual normal. Las mujeres muestran una amplia variabilidad en el tipo o intensidad de la estimulación que desencadena el orgasmo. La alteración provoca malestar acusado o dificultad en las relaciones interpersonales. El trastorno orgásmico no se explica mejor por la presencia de otro trastorno y no es debido exclusivamente a los efectos fisiológicos directos de una sustancia, por ejemplo, drogas o fármacos, o a una enfermedad médica. En el hombre, este problema recibe el nombre de Trastorno orgásmico masculino y presenta, en términos generales, las mismas características.

Eyaculación precoz.- Eyaculación persistente o recurrente en respuesta a una estimulación sexual mínima antes, durante, o poco tiempo después de la penetración, y antes de que la persona lo desee. La alteración provoca malestar acusado o dificultades en las relaciones interpersonales. Esta disfunción no es debida, exclusivamente, a los efectos directos de alguna sustancia.

Vaginismo.- Imposibilidad de realizar el acto sexual debido a la contracción involuntaria de los músculos del tercio inferior de la vagina. En algunos casos, las mujeres que padecen vaginismo pueden gozar de los juegos sexuales, e incluso alcanzar el orgasmo siempre que no se produzca el coito. Es comúnmente descubierta en las adolescentes y mujeres en sus veintes. Las causas más importantes del vaginismo son: miedo al dolor durante la relación sexual, educación estricta y religiosa en donde el sexo fue mostrado como algo malo o no se discutía y experiencias traumáticas en la infancia (no necesariamente de naturaleza sexual).

Dispareunia.- Presencia de dolor genital antes, durante o después de la cópula causando marcada molestia e incomodidad.

Trastorno sexual debido a una enfermedad médica.- Con este trastorno se presenta una alteración sexual clínicamente significativa producida exclusivamente por los efectos fisiológicos directos de una enfermedad médica. Puede presentarse con dolor durante el coito, deseo sexual deficiente o ausente, disfunción eréctil en el varón, etc. Entre las enfermedades médicas asociadas están las neurológicas, enfermedades endocrinas, enfermedades vasculares y genitourinarias.

Trastorno sexual inducido por sustancias.- Alteración sexual debida al consumo de algún tipo de sustancia. Dependiendo del tipo de sustancia consumida, este trastorno puede alterar el deseo y la excitación sexuales, así como el orgasmo, o producir dolor. Las disfunciones sexuales pueden asociarse con la intoxicación de sustancias como el alcohol, las anfetaminas, etc.


2) Parafilias

De las palabras griegas para = “junto a” y philia “amor”, la etimología del término "parafilia" alude a un amor paralelo a la forma "convencional" y que, en la actualidad, hace referencia a conductas sexuales poco comunes que se utilizan para conseguir la excitación sexual. Su clasificación es la siguiente:

Exhibicionismo.- Realización repetida de actos de exposición de los genitales a un extraño con el objeto de alcanzar la excitación sexual, sin intentos posteriores de efectuar relaciones sexuales con el mismo. Es necesario que el otro se sorprenda o espante como requisito para la excitación.

Fetichismo.- Excitación erótica o facilitación y logro del orgasmo a través de un talismán u objeto fetiche, sustancia o parte del cuerpo en particular. El fetichismo sexual se considera una práctica inofensiva, salvo cuando provoca malestar clínicamente significativo o problemas a la persona que lo padece o a terceros, pudiendo en este caso llegar a considerarse un trastorno patológico propiamente dicho.

Frotteurismo.- Obtención de placer, de forma preferente o exclusiva, a través del frotamiento de los órganos genitales contra el cuerpo de una persona desconocida, y sin el consentimiento de ésta. Los frotteurs o "froteristas" llevan a cabo este comportamiento en lugares públicos y concurridos. La conducta típica consiste en acercarse a la víctima, normalmente niñas adolescentes, y apretar sus genitales contra ella, o toquetearle las nalgas y los pechos. Normalmente, va acompañado por una masturbación posterior en la que se recuerda este tipo de situaciones. Este trastorno suele tener un carácter pasajero y se da con mayor frecuencia ente los 15 y 20 años de edad.

Masoquismo.- Conducta sexual desarrollada por individuos que obtienen placer a través del dolor físico o de la humillación, el sometimiento, la degradación o la vejación. En este caso, la excitación es producida por el hecho de sentirse totalmente indefenso ante otra persona, que es quien tiene el control de la situación.

Sadismo sexual.- Implica actos reales en los que el sufrimiento físico o psicológico de la victima es sexualmente excitante. Algunos individuos que padecen este trastorno se encuentran perturbados por sus fantasías sexuales, las cuales evocan durante la actividad sexual, pero sin llevarlas a cabo. El factor común es tener control total sobre la víctima aterrorizada.

Fetichismo transvestista.- Consiste en la gratificación sexual por el contacto y revestimiento con prendas pertenecientes al sexo opuesto (con especial relevancia de ropa interior). En este caso, la ropa del sexo opuesto es el fetiche. Comúnmente hace referencia a hombres heterosexuales que visten de mujer para obtener placer sexual. Es importante subrayar que los fetichistas transvestistas son por lo general heterosexuales. Vestirse de mujer para lograr una satisfacción erótica no tiene relación con dudas sobre su sexualidad o identidad sexual. Por tanto, el fetichismo transvestista no equivale necesariamente a homosexualidad, bisexualidad, transgenero o transexualidad.

Pedofilia.- La característica principal supone actividades sexuales con niños prepúberes. El trastorno comienza en la adolescencia (la persona tiene al menos 16 años y es por lo menos 5 años mayor a la víctima), o en la edad media de la vida. Para la calificación de pedofilia como trastorno sexual es necesario que la conducta se prolongue durante un periodo de al menos seis meses, incluyendo fantasías, impulsos o comportamientos sexuales. Los pedófilos se sienten atraídos por niños mayores, más comúnmente niñas entre 8 y 10 años. Las actividades sexuales que presenta un pedófilo son: desnudar a niños y observarlos, desnudarse frente a ellos, masturbarse en su presencia, tocarlos, penetrar la vagina, boca o ano del niño con dedos, objetos extraños o pene utilizando diversos grados de fuerza. Estos individuos pueden afectar a sus propios hijos, ahijados o familiares, o pueden hacer victimas a niños de otras familias. Otros individuos tienen acceso a los niños al ganarse la confianza de la madre, casándose con una mujer que tenga un niño atractivo, comerciar con otros pedófilos o incluso, en casos raros, adoptar niños en países subdesarrollados o raptarlos. El individuo normalmente es muy atento con las necesidades de los niños para ganar su confianza y evitar que cuenten las cosas a los demás.

Voyeurismo.- Se define como: fantasías sexuales recurrentes y altamente excitantes, impulsos sexuales o comportamientos que implican observar, de manera encubierta, a las personas desnudándose o que se encuentran en plena actividad sexual.

Parafilias no especificadas.- En esta categoría se incluyen parafilias que no cumplen con los criterios para ser consideradas en alguna otra categoría. Tales parafilias son: Escatologicas telefónicas (llamadas obscenas), Necrofilia (con cadáveres), Parcialismo (atención en una parte del cuerpo), Zoofilia (animales), Coprofilia (eses), Clismafilia (enemas) y Urofilia (orina).


3)Trastorno de la identidad sexual

Se caracteriza por la identificación persistente e intensa con el sexo opuesto, lo que desemboca en el deseo de ser o en la insistencia de pertenecer al otro sexo. Esto es diferente a la homosexualidad, ya que los homosexuales casi siempre se identifican con su sexo o género manifiesto. El sentimiento de estar en un cuerpo de género "equivocado" debe persistir por lo menos 2 años para hacer el diagnóstico. Puede darse comportamiento “afeminado” en el caso de un hombre o de “marimacho” en el caso de una mujer. Algunos de ellos pueden cambiar la forma de vestir y otros pueden realmente recurrir a una cirugía para cambiarse de sexo.

Los factores biológicos, como la dotación genética y el medio hormonal prenatal, determinan en gran medida la identidad de género, pero tanto ésta como el papel de género se constituyen de forma estable por influencia de factores sociales, como la cualidad del vínculo emocional con los padres y la relación que cada uno de éstos establece con su hijo.


* Nota: Cabe señalar que la información que se presenta en este artículo sólo pretende explicar, esquemáticamente, la clasificación de dichos trastornos. Para una consulta más amplia de los temas aquí tratados, se sugiere al lector interesado remitirse a las fuentes que fueron consultadas para su realización (Psic. Fdo. R. Baños).


Fuentes consultadas:

DSMIV-TR (Manual diagnostico y estadístico de enfermedades mentales)
http://www.sanamente.com.ar/t_sexualidad.html
http://www.tuotromedico.com/temas/trastorno_identidad_genero.htm#0
http://www.clinicapsi.com/voyeurismo.html
http://www.entornomedico.org/salud/saludyenfermedades/sadismo.html
http://psicologia.costasur.com/es/sadismo.html
http://www.infosexual.net/index.php/2007/11/10/masoquismo-sexual/
http://www.elmundo.es/elmundo/2007/03/08/sexo/1173345991.html - 16k
http://www.psicologiaparatodos.com/psicologianuevo/post.asp?TID=691&PN=1
Flores Colombino, A.: PROBLEMAS ESPECIALES. PARAFILIAS Y VARIANTES SEXUALES, DELITOS SEXUALES, 9 p.m., UCUDAL, Montevideo, 1985.
http://www.redsanar.org/psiquiatrialatina/enf_trast_mentales_disf_sex.html#orgasmicos
http://www.galene.es/problemas_sexuales.html
http://www.jhpsicologia.com/ereccion.htm.
http://estudiantes.medicinatv.com/apuntes/muestra.
http://www.jhpsicologia.com/aversion-sexo.htm#
http://www.cepvi.com/psicosomatica/disfuncion_sexual.shtml
http://www.guia-sexual-del-amante.com/disfunciones_sexuales.html#que_son

2 Comentarios:

Anónimo dijo...

BEUNISI,A ESTA PAGINA DE VERDAD MUYYYYYY INTERESANTE

fernando reyes baños dijo...

Anónimo: ¡Gracias por tu comentario! Ojalá que nuestra información te haya sido útil. Saludos



El contenido plasmado en este blog es producto de la reflexión de su autor, de sus colaboradores y de los pensadores que en él se citan. Cualquier semejanza con la realidad o alguna ficcón literaria, televisiva, psicótica paranoide o de cualquier otra índole es mera coincidencia

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